La mujer embarazada se tumba boca arriba en la camilla de exploración, rodeada de una asepsia muy, muy rigurosa. La especialista extiende gel médico sobre su abdomen y, una vez que se ha controlado la ubicación exacta de la placenta, la posición del feto y el cordón umbilical, la ginecóloga realiza una punción transabdominal guiada...